Seguimos en Blog Mi Boda compartiendo algunos de los desfiles que se han celebrado esta semana en Valmont Barcelona Bridal Week. En este caso, con el desfile de la firma Beba´s Closet, que ha participado por primera vez en la principal pasarela española:
“Llevaba años soñando con este momento, la pasarela VBBFW era nuestro siguiente gran reto. Tras semanas de reflexión buscando el modo de huir de la presión para concebir esta nueva colección di con el personaje literario “le flaneur” y la idea de abrirse al azar. Ahí empezó todo: dejar de buscar, bocetar sin planificación y permitirme deambular. Deshacerme de ataduras a pesar del vértigo y fluir. Y por fin sorprenderme con lo que se desvela sin ser buscado”
Belén Barbero - Diseñadora de Beba´s Closet
Así como “le flâneur” descrito por Walter Benjamin, a partir de la poesía de Charles Baudelaire, deambula por las calles de París sin rumbo, sin objetivo, abierto a todas las vicisitudes y las impresiones que le salen al paso. O como las puertas de Dorothea Tanning que llevan a otras puertas: un infinito que invita a "mirar más allá", a un espacio en el que lo cotidiano y lo extraordinario convergen. En palabras de la artista:
"Tú eres simplemente el visitante, magníficamente invitado. Entra".
¿Qué habrá?
¿Qué habrá?
COLECCIÓN:
La diseñadora articula esta colección en tres actos que giran en torno a la idea de lo imprevisto:
Materiales que huyen de lugares comunes:
A su ya clásico crep japonés le acompañan en su deambular voilettes geométricos que flotan sin casi ser vistos, gasas bordadas con pequeños destellos de luz, mallas de algodón en las que crece una pequeña flor en cada intersección, y jardines de flores que adquieren todo el protagonismo cuando menos lo esperamos.
La diseñadora articula esta colección en tres actos que giran en torno a la idea de lo imprevisto:
Materiales que huyen de lugares comunes:
A su ya clásico crep japonés le acompañan en su deambular voilettes geométricos que flotan sin casi ser vistos, gasas bordadas con pequeños destellos de luz, mallas de algodón en las que crece una pequeña flor en cada intersección, y jardines de flores que adquieren todo el protagonismo cuando menos lo esperamos.
Colores inesperados que se adueñan del blanco:
El blanco se abre lentamente al imprevisto y casi sin darnos cuenta el color se va colando en la paleta de color de la colección. Primero en forma de leves destellos de luz dorada, que poco a poco darán paso a un primer rosa empolvado tímido y translúcido. Sutilmente el misterio se va desvelando y el azul noche, el lavanda e incluso el amarillo de minuciosos bordados artesanales se adueñarán de la colección en una combinación inesperada en el mundo nupcial.
Patrones dulces que esconden volúmenes poderosos:
Siluetas fluidas en crep contrastan con mangas opulentas y voluminosas, logrando el binomio delicadeza-fuerza sello de la firma. Suaves caídas al bies nos desconciertan al descubrir potentes hombros marcados y mangas de volúmenes estructurados y flotantes construidos en tules semi transparentes que sugieren delicados pero decididos.
En esta ocasión la firma ha colaborado con Calzados Franjul, una firma que nace en 1947 en Madrid y que desde entonces realiza modelos únicos y totalmente personalizados. En su pequeño taller del Barrio de las Letras de Madrid trabajan de manera 100x100 artesanal, convirtiendo cada zapato en una pieza exclusiva.