Marta y Nacho se conocen desde los 15 años, pero no empezaron a salir hasta cumplir los 17. Coincidieron un verano en Campoamor, Alicante en una fiesta de disfraces, y desde entonces no se han vuelto a separar.
Se casaron el 15 de septiembre de 2018 en la iglesia San Fermín de los Navarros, ubicada en el barrio madrileño de Chamberí. El equipo de Elena Bau fue el elegido para capturar los momentos más especiales de su gran día.
El vestido de Marta fue obra de la joven diseñadora española Claudia LLagostera, al igual que el de su madre. El novio lució chaqué y complementos de Tom Black.
La novia escogió a su amiga Laura Sandoval para que se encargara del maquillaje y a Pimi para el peinado.
Las flores en el lugar de la ceremonia corrió a cargo de Botánica 24 y Claudia y María de Sibilina Deco, se encargaron del ramo y las flores en el lugar de celebración.
La celebración tuvo lugar en el Palacio de Aldovea, un enclave situado a pocos km de la capital que destaca por la belleza de su fachada, sus jardines y su exquisita decoración.
De la decoración se encargo la hermana de Marta con su empresa A Tu Vera Eventos, una empresa que trabaja para que los eventos tengan un hilo conductor y puedas disfrutar con los cinco sentidos.
Durante la celebración Dándote ritmo y una banda de música llamada Niceprice, el broche final para una noche inolvidable y llega de diversión.
Para los novios fue un día 24 horas emotivo, pero según Marta "Los momentos más especiales fueron el abrazo al llegar al altar, su baile y el ramo a la abuela de Nacho, que nos sigue diciendo que lo tiene en agua sano y salvo y que lo está cuidando para que no se estropee".
"También la sorpresa que nos dieron los amigos de nacho, nos regalaron al saxofonista Benjamín Dorado para animar la fiesta, fue brutal".
